El puente de la Salve (antiguamente, puente del General Mola) une Artxanda con el centro de Bilbao y se ha convertido en el guardián del Guggenheim. Desde 2007 destaca el añadido que le ha puesto el artista francés Daniel Buren en forma de puerta roja y que teóricamente comunica a la ciudad con el Universo. Se buscaba transformar el puente en monumento aprovechando el décimo aniversario del Guggenheim y para ello se previó un presupuesto de dos millones de euros. El recubrimiento rojo oculta los cables y parte de la estructura del puente de La Salve. Además, las luces nocturnas realzan mucho el arco. El nombre “La Salve” proviene del saludo religioso, ya que éste era el primer punto en el que los marinos podían ver la Basílica de Begoña al remontar el Nervión.
Canto de la Salve Marinera:
Salve!
Estrella de los mares, de los mares Iris, de eterna ventura.
Este blog pretende ser una ampliación a toda la información que se lee en las páginas del libro. Con él se pretende enriquecer el proceso lector y aprender con la lectura.
Seja o primeiro a comentar
Publicar un comentario